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Reflexiones de un Aspirante Rosacruz
de Richard Koepsel

(Reflections of a Rosicrucian Aspirant
by Richard Koepsel)


Spanish Version


Tabla de Contenido
  1. Cambio »  PDF »
  2. ¿Por qué cantan los pájaros? »  PDF »
  3. La esposa de Lot »  PDF »
  4. Como somos conocidos »  PDF »
  5. Cristo y el Ganado »  PDF »
  6. PIB »  PDF »
  7. ¿Agregando a la Confusión? »  PDF »
  8. ¿Qué hay para Mí? »  PDF »
  9. Expiación Vicaria »  PDF »
10. En las Películas »  PDF »
11. Economía del Lado de la Oferta »  PDF »
12. Rayos Cósmicos »  PDF »
13. Reciclaje »  PDF »
14. Celebridad »  PDF »
15. Alabanza »  PDF »
16. Oraciones a los Santos »  PDF »
17. Libros »  PDF »
18. Donde más se necesita »  PDF »
19. Ahora Sabemos en Parte »  PDF »
20. La Voz del Pastor »  PDF »
21. ¿Escribió Jesús este Libro? »  PDF »
22. I A »  PDF »
23. Identificación »  PDF »
24. El Misterio de la Encarnación »  PDF »
25. El Hombre Invisible »  PDF »
26. Conciencia »  PDF »
27. Privacidad »  PDF »
28. El Problema del Yo »  PDF »
29. Covid-19 »  PDF »
30. OVNIs »  PDF »
31. Cierre »  PDF »
32. Triunfador »  PDF »
33. Soledad »  PDF »
34. Desalojo »  PDF »
35. El Punto de Dios »  PDF »
36. Dolor »  PDF »
37. El Problema del Mal »  PDF »
38. La Gracia y el Perdón de los Pecados »  PDF »
39. Martirio »  PDF »
40. ¿Qué Hay de Nuevo? »  PDF »


Donde más se necesita

La primera parte del Servicio de Sanación de la Fraternidad Rosacruz es una lectura inspiradora. Su propósito es despertar un sentimiento intenso en los participantes. Los sentimientos intensos llevarán las oraciones a lo más profundo de los mundos espirituales, donde podrán recurrir al Espíritu de Vida, la fuente de toda sanación. La lectura también lleva a los participantes a un enfoque común sobre la rosa blanca en el centro del emblema Rosacruz. El servicio es un medio para producir una forma de pensamiento para recibir y mantener la fuerza curativa, que luego los Auxiliares Invisibles recogen de los mundos internos. Después de la lectura, hay una larga y profunda sesión de oración. Cuando finaliza la sesión de oración, el lector cubre el emblema y dice: “Ahora dejaremos la fuerza sanadora liberada con Cristo y los Ayudantes Invisibles para que la usen donde más se necesita”.

La curación espiritual es un tema amplio y profundo, digno de volúmenes, demasiado para un breve ensayo. Incluso los grandes esfuerzos tienen pequeños comienzos. Se ha dicho que el viaje de mil millas comienza con el primer paso. Este ensayo es un pequeño paso que puede estar titubeando. Se centrará en las últimas cinco palabras del Servicio de Sanación, “donde más se necesita”.

Platón, de quien Max Heindel nos dijo que era un Iniciado, habló mucho sobre la curación. Algo de lo que dijo sobre el tema, que es relevante para nuestro tema, está en el diálogo llamado El Cármides, un diálogo sobre la templanza:

Charmides, un joven noble, ha estado teniendo dolores de cabeza al despertarse por la mañana. Le han dicho que Sócrates tiene un encanto que curará sus dolores de cabeza, por lo que acude a Sócrates. Sócrates le dice que el amuleto hará más que curar el dolor de cabeza. Luego procede a contarle al muchacho lo que ha escuchado de médicos eminentes. Dice que esos médicos no curarán una dolencia de los ojos, por ejemplo, sin curar también la cabeza. No se puede curar la cabeza sin curar todo el cuerpo, el cual no se puede curar sin curar también el alma. La idea es que el cuerpo y el alma, los principales componentes del todo, deben estar en equilibrio en sí mismos y entre sí, para que todo el ser esté sano.

Platón enseñó salud holística miles de años antes de la Nueva Era. La templanza era el medio para equilibrar el cuerpo, el alma y todo el ser. Lo que es la templanza, nunca se alcanzó en el diálogo, pero eso es irrelevante para nuestros propósitos. La visión de Platón sobre la curación está en concordancia aproximada con la filosofía Rosacruz, que también enseña que la curación física y espiritual son complementarias para las curas duraderas, pero hablaremos de eso más adelante.

A los treinta y tantos años, este escritor contrajo un caso grave de neumonía. Cuando persistió, el diagnóstico posterior encontró que tenía un gran tumor bronquial canceroso. Era una variedad rara que tiene su origen cuando los pulmones se separan de los intestinos en el embrión. En ese momento, las células madre intestinales a veces van a los pulmones donde producen un tumor. El cáncer había estado con él durante toda su vida, antes de que se descubriera alrededor de los cuarenta años. Para disgusto de sus médicos, decidió hacer una terapia alternativa. Leyó una estantería de libros sobre el tema y se decidió por la Terapia de Gerson. Esta elección estuvo de acuerdo con los hallazgos de Michael Lerner, PhD, en su excelente libro, Choices In Healing (Opciones en la Curación), publicado por MIT Press en una fecha posterior a la enfermedad de este escritor. La terapia fue parcialmente exitosa. El cuerpo del escritor fue regenerado a una salud vigorosa. La terapia mantuvo el cáncer en un punto muerto, pero el tumor permaneció. La terapia podría haber sido completamente exitosa si el paciente hubiera usado enzimas pancreáticas naturales, que se usan en la mayoría de las terapias alternativas exitosas, para descomponer los tumores. Se negó a hacer eso porque no quería vivir tomando la vida de los animales. Eventualmente, la cirugía fue necesaria, pero no se necesitó ninguna otra terapia porque, por lo demás, su salud era excelente. Al estudiar la terapia alternativa, aprendió que los tumores malignos son más fáciles de erradicar que los tumores benignos. La razón de esto es que la inteligencia del cuerpo, como un todo, sabe lo que es más peligroso para él, y va tras la fuente del peligro en proporción al grado de peligro. Así, la noción de tratar todo el cuerpo, sostenida por Platón y la filosofía Rosacruz, resulta cierta en la práctica. La inteligencia del cuerpo sabe dónde se necesita más la curación.

El cuerpo no tiene que ser pensado como lo pensamos normalmente. La forma en que lo pensamos es miope. Una visión evolutiva del cuerpo es mucho mejor para nosotros. Por lo general, pensamos en él como algo discreto de un solo uso para toda la vida. Incluso los estudiantes que creen en el renacimiento lo ven como una forma que se descarta al morir. En el mejor de los casos, los cuerpos sucesivos se ven como cuentas en un collar de renacimiento. En realidad, el cuerpo físico es una entidad evolutiva, una creación que pasa por numerosas etapas y cambios. La filosofía Rosacruz nos dice que comenzó como una forma de pensamiento en el Período de Saturno, cuando nuestra manifestación creativa solar no era más densa que un pensamiento concreto. En ese momento, éramos como minerales, y nuestra experiencia y servicio eran para proporcionar sustancia a las cosas formadas por otros seres creativos, al igual que lo hacen ahora nuestros minerales actuales. El cuerpo físico persistió y evolucionó a través de etapas similares a plantas y animales en los Períodos Solar y Lunar respectivamente, hasta que se convirtió en una forma humana en el presente Período Terrestre. Incluso en el Período Terrestre ha pasado por muchos cambios. En la Época Polar, su forma (pero no su tamaño) era más parecida a un virus que al magnífico organismo que es ahora. Una buena manera de empezar a tener una mejor idea de ello es concebirlo como algo análogo a uno de esos videos publicados por los museos de arte, en los que un rostro de un cuadro famoso se transforma en el rostro de otro cuadro famoso, y así sucesivamente. La principal diferencia es que la forma humana entra y sale, a través de los mundos espirituales, en diferentes períodos evolutivos a medida que se transforma. Todas las experiencias de forma, sustancia y otras cualidades físicas, se registran en el corazón de la misma. Nada se pierde. Cada experiencia de la forma está incorporada en él. Todo lo que es, y fue, es parte de ella. Todo se convierte en la base de la forma en nuevas expresiones creativas dentro del esquema divino de la creación. Este “todo” incluye los errores que hemos cometido en el camino al romper las leyes de la naturaleza en los diversos mundos en los que evolucionamos. Hay una especie de sabiduría y lógica cósmica en esta forma, y hay una inteligencia divina del Espíritu que la creó y obra a través de ella. Debido a los límites de la materia, y de nuestras habilidades creativas, no podemos, en este momento, manifestar todo en un cuerpo físico y una vida. Se podría decir que tenemos un retraso en el destino material. Con la ayuda de los Ángeles Archiveros, elaboramos lo que más se necesita en un renacimiento dado de acuerdo con la lógica del todo. Así, cada edición del cuerpo, y su tiempo de vida, tiene su propia lógica, y esa lógica está en armonía con la lógica de todo el cuerpo evolutivo. La curación, para que sea verdadera y duradera, debe estar en armonía con esta lógica, en lo grande y en lo pequeño.

Todo esto parece muy complicado. Uno siente que pasará mucho tiempo antes de que pueda entenderlo lo suficiente como para convertirse en un sanador físico, tal vez varios renacimientos. Eso es cierto, si se habla de sanación física directa, como Cristo, que remodeló los cuerpos. La curación no tiene por qué ser complicada. Se han hecho cosas maravillosas sin complicaciones. Las curaciones se han producido a través de la simple oración hecha según la voluntad del Padre.

La oración es un acto de magia. La magia es un acto de utilización de fuerzas creativas divinas que trascienden las fuerzas normalmente activas en el mundo físico. Aunque las fuerzas espirituales usadas en la magia superan las leyes regulares de la física, no carecen de ellas. Max Heindel nos dice que cuanto más acceso tenemos a los poderes espirituales superiores, más restricciones morales se nos imponen. La carga moral es enorme. Incluso en una simple oración de sanidad para un amigo, es importante que alguna forma de “hágase tu voluntad” sea parte de la oración. También es importante no violar la voluntad del destinatario de la oración. La curación a través del Espíritu de Vida es una forma de gracia que Cristo nos ofrece. Aunque ofrecido, somos libres de recibirlo o no. Todo el mundo tiene esa libertad, y no debe anularse.

Uno debe ejercer buen juicio sobre la idoneidad de las restricciones a la oración. Si uno se vuelve demasiado restrictivo, termina no orando lo suficiente. Podría estar bien orar por alguien sin su conocimiento, siempre que haya una condición en la oración de que acepte la oración en algún nivel de su ser. Ha habido momentos en la vida de este escritor en los que se ha salvado de cometer errores graves al recibir oraciones no solicitadas que, en su desesperación, estaba dispuesto a recibir. El principio en esto parece ser que cuanto más directo y específico sea un acto de magia, más conocimiento (especialmente conocimiento moral y espiritual) debe tener el practicante, y que haya más aceptación es un factor importante. Los Auxiliarse Invisibles solicitan aceptación semanal.

La oración es una habilidad que debe usarse con respeto, conocimiento y cuidado. Tolstoi cuenta un cuento popular ruso sobre un hombre que hace un acto de bondad hacia un extraño que se encuentra en un camino. El forastero era un ángel en forma humana que le dice que, por su bondad, le es concedido que todo lo que quiera se le haga, hasta la puesta del sol. El hombre continúa su camino y se encuentra con alguien que está siendo golpeado, lo que desearía que no fuera así, y su deseo es concedido. Tiene otros encuentros en el camino, en los que desea que las cosas que vio, fueran diferentes de lo que eran, y sus deseos fueron concedidos. Se siente bien con sus obras. Al atardecer se encuentra de nuevo con el ángel. El ángel lo lleva de regreso por el camino y le revela que cada acto que cambió no fue para mejor, como él pensó que era, y que en realidad había interferido con algo bueno que se estaba gestando. Su bendición no era lo que sus deseos habían concedido. Fue así que aprendió que un conocimiento más completo de lo que estaba sucediendo es más importante que simplemente tener deseos concedidos para cambiar las cosas sobre la base de las apariencias. Es así con la curación espiritual. Cuanto más específica y directa sea la aplicación de la curación, más se debe saber para aplicar éticamente la fuerza curativa. A veces la mejor oración es una oración para ayudar. al paciente a comprender por qué está sufriendo. Le tomó a este escritor cuatro años de sufrimiento con cáncer, y cinco años después de la cirugía, para entender por qué tenía cáncer. Hasta el día de hoy, unos cuarenta años después, todavía recibe ideas al respecto. La astrología fue útil para llegar a la comprensión, pero no tan importante como enfrentarse a sí mismo. Tuvo que admitir que había algunas cosas desagradables sobre sí mismo que estaban detrás del cáncer. En la mayoría de las enfermedades, el paciente no sabe por qué la enfermedad se ha producido hasta mucho después de la muerte, muy probablemente en el segundo o tercer cielo, cuando la experiencia se digiere y asimila. Lo que más se necesita puede ser tan importante como el lugar donde más se necesita. La sabiduría y la perspicacia suelen ser más importantes que eliminar los síntomas. Oliver Wendell Holmes tiene una maravillosa frase de poesía sobre esto: “No llores por los que llevan la cruz, sino por los que llevan la cruz sin la gloria”.

Para entender la curación, es útil entender cómo se produce la enfermedad. La enfermedad se manifiesta en los mundos concretos de la misma manera que todo se manifiesta en la creación. Sigue el mismo camino cosmológico que la curación y las mismas leyes de la naturaleza. La enfermedad entró en nuestra corriente humana de evolución en el momento de lo que se llama "la caída". En ese momento nuestras individualidades eran nacientes y débiles en la autoconciencia. Fácilmente nos engañábamos. En el miedo y la inseguridad, nacidos de la creciente conciencia de la muerte de nuestros cuerpos físicos densos, se nos hizo creer que juntos podríamos obtener la inmortalidad usando la fuerza creativa para generar nuevos cuerpos a voluntad. No fue una mentira. Era una verdad parcial. La parte que faltaba del todo era que, si la fuerza creativa no se usaba en armonía con las leyes de la creación mayor, introduciríamos discordia y consecuencias no deseadas, en el microcosmos y el macrocosmos, en la creación, cosas como el endurecimiento del materialismo, enfermedades y otros males. No podemos aislar nuestras acciones. Lo que sucedió en la caída fue que nosotros, como Yoes (todavía no había una naturaleza inferior), elegimos usar la fuerza creativa antes de saber cómo usarla en armonía con las leyes de la naturaleza. Fuimos tentados, pero no podemos culpar a los tentadores, ni a la tentación, por nuestras elecciones. Todo esto significa que nosotros, como seres espirituales creativos, nosotros mismos, estamos sesgados en nuestras autoconcepciones. No estamos enfermos como Yoes, que son seres espirituales, pero necesitamos sanación espiritual para corregir los conceptos erróneos que tenemos sobre nosotros mismos.

Como seres creativos, manifestamos nuestras creaciones en los mundos concretos. Nuestras creaciones incluyen nuestros diversos cuerpos y nuestras vidas, muchos de los cuales se crean en concierto con otros. Toda manifestación en los mundos concretos comienza con el pensamiento concreto. Esto es cierto incluso cuando el cuerpo de deseos sustrae la mente concreta para sus propios fines. A voluntad del pensador, los pensamientos concretos se revisten de deseo. Los deseos motivan la acción o la vida en los éteres. Las acciones precipitan formas y condiciones en el mundo químico, físico. Esta simple secuencia cosmológica de causalidad vertical es de gran alcance para explicar la enfermedad y muchas otras cosas. Por ejemplo, los pensamientos egoístas producen deseos egoístas, que producen acciones egoístas, que producen condiciones físicas limitantes, como la enfermedad. Aunque simples, muchas de estas manifestaciones se vuelven asombrosamente complejas, especialmente cuando se desarrollan a lo largo de varias vidas, mientras tratamos de evitar consecuencias desagradables.

De la misma manera que el viaje de mil millas comienza con el primer paso, la salud comienza con acciones simples. El primer paso en la medicina y curación espiritual, preventiva, es el control del pensamiento. La filosofía Rosacruz enseña que la mente concreta está en las primeras etapas de su desarrollo. Todavía es maleable, mientras que el cuerpo físico denso es nuestro vehículo más maduro y no se presta a un cambio inmediato. “¿Quién de vosotros, en su afán, podrá añadir un codo a su estatura?” Con un esfuerzo concertado, uno puede obtener el control de la mente concreta. De eso se trata nuestro ejercicio de concentración. Uno puede sustituir pensamientos los pensamientos negativos habituales por pensamientos positivos. Esto requiere que uno, en espíritu, esté alerta y consciente de sus pensamientos y patrones de pensamiento, por lo que también es un ejercicio espiritual de autoconciencia. Hacer esto fortalece al pensador, la mente y el arquetipo que, a su vez, mejora la calidad de vida, la salud y la longevidad. El control del pensamiento no es fácil. Algunos de sus beneficios son inmediatos y otros llevarán un tiempo. Puede llevar varias vidas lograr el control total del pensamiento. En cualquier caso, la meta es una meta valiosa y una de las mejores maneras en que podemos gastar nuestra energía.

Gran parte del enfoque Rosacruz de la salud es la prevención. Comenzar en el camino hacia la salud cambiando el pensamiento es un enfoque de arriba hacia abajo. Los métodos de arriba hacia abajo a menudo requieren tiempo para ser efectivos. Se necesita tiempo para que un pensamiento madure y trabaje a través de los mundos superiores hacia el mundo físico. A menudo hay circunstancias en las que el tiempo es esencial. Si alguien ha sufrido una herida grave y está sangrando profusamente, o si alguien acaba de sufrir un derrame cerebral, no es momento de predicar las virtudes de cambiar el pensamiento. Las condiciones de emergencia requieren una acción de emergencia. La medicina moderna tiene muchos medios excelentes para manejar emergencias. Max Heindel señala que al cambiar la vida de uno mejorando la dieta, haciendo ejercicio y desarrollando actitudes positivas, se pueden evitar muchas enfermedades y condiciones de emergencia. Incluso algo tan simple como reducir el consumo de alimentos en exceso puede disminuir la probabilidad de resfriados, y recibir mucho sol puede hacer lo mismo con la gripe. No todas las prácticas preventivas son espiritualmente correctas. Algunos métodos de prevención en boga en la alopatía no son buenos y muchos implican cuestiones morales y sociales.

Uno de estos problemas involucra la noción de superpoblación, que podría no ser un problema: "los Ángeles Archiveros están por encima de los errores". Debido a esto, algunos embarazos se consideran indeseables, algunos incluso se consideran meramente inconvenientes. Ahora es ley en los Estados Unidos que el aborto es legal. Este escritor de ninguna manera está a favor del aborto, pero se da cuenta de que el aborto es un problema moral y espiritual que no puede ser resuelto con leyes a favor o en contra. Es sólo elevando la conciencia moral y espiritual que el tema del aborto se puede resolver El parto es un proceso natural cerca del final de la serie causal mencionado anteriormente. Los Ángeles Archiveros están ayudando a las personas a trabajar en su destino y trabajando creativamente, a través de este proceso natural. En el momento del aborto, varios seres espirituales han puesto mucho esfuerzo en el nacimiento previsto. Abortar es frustrar tanto el destino como los procesos naturales y, sin duda, tendrá graves consecuencias. Algunos optan por ir más allá en la cadena causal y usan el control de la natalidad. Eso es mejor, ya que evita el desperdicio de energía y el embarazo no deseado, pero no hace nada para redirigir la energía creativa o cumplir el destino. Tampoco hace nada para reformar el deseo. Mejorar no es lo mejor. Lo mejor es ir a la cima de la cadena causal y atrapar el impulso antes de que se convierta en pensamiento. En nuestros tiempos, la mayoría consideraría ridícula esta sugerencia. Puede ser, ya que muy pocos tienen el control, o incluso quieren tener el control de su forma de pensar. Sin embargo, como sabemos mejor, es nuestro deber abordar el problema del mal uso de la fuerza creativa, dado que es tan importante. Debemos alzar la voz aunque no siempre seamos capaces de cumplir con los más altos estándares de conducta. Si no lo intentamos, nunca sucederá. Nuestra porción de la fuerza creativa es el mayor poder que tenemos. Es la fuerza que crea, sustenta, transforma y disuelve todo en el cosmos, y el cosmos mismo. Toda la curación y otras formas de magia se logran a través de su agencia. Una vez despertada, la fuerza creativa y el deseo procreador son casi imposibles de negar. Si se transmuta, es el sentimiento intenso el que impulsa las oraciones de sanación exitosas. Hemos tenido muchas vidas de desarrollar el hábito de la expresión sexual sin inhibiciones y sin transmutar. La sociedad y la mayoría de las autoridades médicas y psicológicas enseñan que una vida sexual libre y fluida es saludable. De estas cosas, podemos ver que el camino hacia un futuro completamente saludable para la humanidad es una lucha cuesta arriba. Dado que la fuerza creativa es central y fundamental para la salud y la curación, esto es de vital importancia. El Adversario, que nos cosecha en busca de energía creativa y la experiencia generada por su mal uso, sabe que esto es importante y hace lo que puede para mantenernos en nuestros caminos desviados. La mayor parte de la medicina moderna es de abajo hacia arriba, si eso cabe. Para muchas condiciones, simplemente manipula los síntomas aparentes a través de productos farmacéuticos. A menudo, esto simplemente cambia los sufrimientos a "efectos secundarios". Esto se hace, a pesar de que los cursos más básicos de fisiología enseñan el equilibrio, en forma de homeostasis, necesario para el buen funcionamiento del organismo humano. La lista de "efectos secundarios" en una etiqueta o en un anuncio farmacéutico es aterradora. Debido al materialismo, la mayoría de los médicos no saben, o no creen, que existe un enfoque de arriba hacia abajo o espiritual para la salud y la curación. Cuando este escritor mencionó su búsqueda del alma para encontrar la razón interna de su cáncer, el médico le dijo que no hiciera eso, porque solo produciría una carga de culpa. No lo hizo. De hecho, alivió la negación de sí mismo que había estado con él la mayor parte de su vida.

Además de ser de abajo hacia arriba de otra manera, la medicina moderna es producto de la “caída”. Caímos porque se nos hizo conscientes de la muerte de nuestros cuerpos físicos de tal manera que temimos a la muerte. Tomamos un camino equivocado para calmar nuestro miedo. Desde entonces hemos estado preocupados por la muerte. La muerte se ha convertido en la forma en que tratamos nuestros problemas. Nuestra preocupación por la muerte es más que el asesinato y la guerra. Si tenemos enemigos en nuestros cultivos, matamos al enemigo – muerte. Cuando los venenos de las cosechas entran en nuestros cuerpos, causan cáncer. Luego tratamos de matar al enemigo, que es el cáncer, con más venenos como la quimioterapia y la radiación – muerte. Tratamos de matar todas las demás bacterias, hongos o virus que creemos que amenazan nuestra salud. No funciona. No funciona porque se trata de proteger la vida con medidas de muerte, y las formas de vida, que son las causas finales de la enfermedad, mutan y evolucionan mientras nosotros, al mismo tiempo, no estamos evolucionando. Queremos evolucionar fortaleciendo nuestro sistema inmunológico. Queremos evolucionar cambiando nuestras actitudes hacia algo pro-vida, algo pro-evolutivo.

Hay otra cosa que hacemos, con respecto a la enfermedad, que lo hacemos con miedo. Tratamos de bloquear la enfermedad. Parece que pensamos que la enfermedad es algo que simplemente sucede, casi algo aleatorio. Una enfermedad, especialmente una enfermedad importante que probablemente termine en la muerte, no sucede simplemente. Casi todas las experiencias importantes en la vida están destinadas. Están integradas en los arquetipos de nuestras vidas y cuerpos mientras nos preparamos para renacer. Construimos nuestros arquetipos con la ayuda de los Ángeles Archiveros, “que están por encima de los errores”, como nos dice nuestro servicio de sanación. En la enfermedad sufrimos. Cuando sufrimos, los efectos del sufrimiento se hunden en nuestro ser interior como material del alma. Eventualmente, cuando el material del alma del sufrimiento se asimila al Espíritu, el Espíritu se despierta, aprende de la experiencia y hace correcciones. La mayor parte de este aprendizaje y corrección viene después de la muerte. A veces, aprender y corregir requiere más de un renacimiento. El sufrimiento no es un medio eficaz para el crecimiento del alma, como lo es la retrospección, pero es seguro y eficaz. Este escritor mejoró en carácter después de sufrir su ataque de cáncer.

Son nuestras fechorías - sobre todo nuestros pensamientos y deseos errantes - las que se cristalizan en enfermedades y condiciones médicas limitantes. Emerson dijo, con ingenio y sabiduría, que “un hombre enfermo es un pecador descubierto”. Las consecuencias de nuestras fechorías son indudables, a menos que hagamos algo al respecto. Como primer paso, aceptar la propia condición como consecuencia de un comportamiento pasado, es saludable espiritualmente. Aceptar las condiciones que nos presenta el destino no debe ser algo que se haga pasivamente. Somos seres divinos y es nuestro deber participar activamente en nuestros destinos con la transmutación creativa. Intentar bloquear las consecuencias no es transmutar. Aprender las causas espirituales de la condición de uno es el siguiente paso hacia la transmutación. Si el individuo en el lecho de enfermo, que grita “¿por qué yo?”, oraría y escuchara interiormente por una respuesta a esa pregunta, la mejora y el progreso evolutivo podrían comenzar de inmediato, en lugar de tener que esperar hasta después de la muerte.

De paso, hay que decir que es perverso buscar la enfermedad. Hacerlo es una forma leve de masoquismo que necesita curación psicológica. La aceptación, como parte de la regeneración, es diferente de la invitación.

La prevención es mucho más eficiente en el crecimiento del alma que luchar con las consecuencias de las fechorías pasadas. Bloquear la enfermedad no es prevenir. Bloquear solo difiere el destino, aunque nosotros, en nuestra oscuridad espiritual, nos hemos vuelto bastante hábiles para bloquear a través de la ciencia material y la medicina. El bloqueo no transmuta y, a veces, tiene efectos secundarios dañinos e inmediatos. Es groseramente ineficiente aplazar el destino a otro renacimiento. En nuestra oscuridad espiritual, la mejor prevención es conocer y comprender el propio carácter, para luego transmutar los defectos en virtudes, en algo positivo. La astrología y la retrospección son excelentes herramientas para hacer esto.

El objetivo de todos los métodos de curación es hacer que la enfermedad se extinga. Los defensores del bloqueo creen que lo pueden hacer ante una enfermedad, o una familia de enfermedades, en el momento en que surjan. Esta filosofía es ex post facto, después de que ha surgido la enfermedad. Max Heindel nos dice algo que demuestra que esta filosofía podría no funcionar:

“Pero el hombre es un creador por medio de sus pensamientos, y los malos pensamientos, los pensamientos de miedo y odio, toman forma y en el transcurso de los siglos cristalizan en lo que conocemos como bacilos. Los bacilos de las enfermedades infecciosas son particularmente la encarnación del miedo y el odio y, por lo tanto, también son vencidos por la fuerza opuesta, el coraje”.

Los "bacilos" incluyen virus y priones, así como bacterias. Hay 320.000 virus conocidos que infectan a los mamíferos, en el momento de escribir este artículo. Es posible que bloquear un microbio, o una familia de microbios, no nos proteja del siguiente que somos propensos a crear. Cambiar nuestro pensamiento llega a la raíz del problema. El miedo lo exacerba. Si hubiera un método de bloqueo que proporcionara el mismo crecimiento del alma que vendría de vivir el destino maduro, probablemente sería algo bueno. Sin embargo, eso no existe más que una píldora para dar coraje para resistir la enfermedad.

En la ignorancia del renacimiento y del principio de causa y consecuencia, el miedo se ha institucionalizado. La mayoría de las naciones y estados tienen leyes que exigen procedimientos de bloqueo, especialmente para los más vulnerables, bebés y niños pequeños. Estas leyes no pueden evitarse sin evitar la “civilización”. Siendo esto cierto, lo mejor que pueden hacer los padres para proteger los cuerpecitos vulnerables es diferir el mayor tiempo posible, para permitir que el organismo recién nacido desarrolle la fuerza para resistir el impacto del proceso.

Los desarrolladores, productores, distribuidores y defensores del bloqueo no son malas personas. Es probable que no sufran un destino horrible. Su intención es buena. Están haciendo lo mejor que pueden con lo que saben. Que no sepan mejor es nuestra culpa por no brindar una mejor educación espiritual.

En esto, como en todas las cosas, debemos sopesar nuestras opciones. La vida espiritual se trata de sacrificio. Supongamos que un aspirante anciano tiene un trabajo importante que llevar a término en los últimos años de su vida. En tal caso, el uso de un método de bloqueo frente a una amenaza real e inminente, podría ser el sacrificio juicioso a realizar. Este escritor tiene un amigo, de gran estima, que lo ha hecho así, y este escritor lo considera noble. En este mundo de limitaciones, a menudo no hay absolutos. Siempre debemos ejercer el buen juicio.

Anteriormente, en este ensayo se afirmó que la materialización creativa sigue un camino cosmológico. Nuestras vidas y cuerpos son materializaciones creativas. Nuestras vidas y cuerpos comienzan con el Ser, el Pensador, y siguen el camino de los pensamientos a los deseos a los éteres y, finalmente, a las formas físicas. Antes de nacer, el Espíritu crea un arquetipo de nuestras vidas y los diversos cuerpos que necesitamos para vivirlas. En esta preparación, se requiere cooperación. Debido a que solo somos principiantes en la creación, necesitamos ayuda. La ayuda la brindan los Ángeles Archiveros que entienden el funcionamiento del Destino, cosa que nosotros no hacemos. Por ejemplo, es posible que no entendamos qué, de nuestro destino de renacimientos pasados, está maduro para la transformación en este renacimiento. También necesitamos ayuda porque nuestras individualidades han sido descarriadas, lo que precipitó nuestra caída. En nuestra debilidad nos rehuiríamos y contraeríamos.

La cooperación y la asistencia son necesarias en cada paso del camino cosmológico. En el mundo del pensamiento, donde construimos el arquetipo, necesitamos ayuda porque estamos lejos de ser pensadores perfectos. También necesitamos cooperar porque no vivimos aislados. Nuestros arquetipos individuales deben encajar con los arquetipos de otros humanos e incluso otros tipos de seres. Incluso la materia de los mundos y los cuerpos que formamos en esos mundos deben usarse con cooperación. El error es posible en cada paso del camino.

Al crear el arquetipo se tiene en cuenta el contenido del átomo simiente de cada uno de nuestros cuerpos, y el arquetipo incluye su contenido. Esto significa que cada uno de nuestros vehículos se construirá de acuerdo a cómo hemos vivido en ellos en el pasado, además de un pequeño avance creativo nuevo, que varía en cantidad de individuo a individuo. De acuerdo con las acciones y omisiones del pasado, un individuo puede tener una buena mente y una orientación egocéntrica en el cuerpo de deseos, por ejemplo. La variedad y los detalles son casi ilimitados como vemos en los que nos rodean, no hay dos iguales. Cuando el arquetipo está completo y listo, se pone a girar, por así decirlo, por la voluntad de vivir. Se activa cuando las condiciones en los diversos mundos son tales que el propósito de la vida puede cumplirse – a veces, los individuos nacen antes de tiempo y, a veces, los individuos nacen atrasados. En esto, es importante señalar que la posibilidad de enfermedad está integrada en nuestras vidas y cuerpos. Aceptamos esas posibilidades negativas si no hemos aprendido de nuestras vidas pasadas y seguimos errando, como lo hemos hecho en el pasado. La enfermedad viene de adentro, no de afuera. Si no tenemos las semillas de una enfermedad dentro de nosotros, no la contraeremos por muy contagiosa que sea. El destino es perfectamente justo, si podemos ver claramente y lo suficientemente profundo en él. Debe agregarse que todos somos lo suficientemente similares, en algunos aspectos, para contraer un contagio de proporciones epidémicas. Evidentemente, no es prudente actuar como si uno fuera invulnerable a una enfermedad contagiosa a menos que uno sepa sin duda alguna que es invulnerable – pocos lo son. De paso, parece necesario notar que, si uno despierta miedo, o algún otro estado de debilitamiento interno, en otro, ese individuo puede activar la posibilidad que de otro modo no se activaría. Somos los “guardianes de nuestro hermano”.

La curación espiritual sigue el mismo camino cosmológico que viene a renacer y manifestar una enfermedad. Comienza con una forma de pensamiento. En el Servicio de Sanación Rosacruz, los participantes construyen una forma de pensamiento a través de una oración intensa y llena de sentimiento. La Filosofía Rosacruz nos enseña que las formas de pensamiento son vacías. La forma de pensamiento curativo es un vacío para recibir y sostener el Espíritu de Vida. Toda curación viene del Espíritu de Vida. El Espíritu de Vida es la fuente del Ser y de todas sus manifestaciones creativas. La naturaleza y el carácter del Espíritu de Vida lo abarcan todo y van más allá de nuestro lenguaje limitado. No obstante, Max Heindel ha hecho un excelente trabajo al darnos una idea del Espíritu de Vida en sus atributos. Él nos dice que los tres atributos del Espíritu de Vida son: vida, luz y amor. Cada uno de estos atributos parece encajar perfectamente en una etapa del camino cosmológico de la manifestación concreta.

La Vida en Espíritu de Vida significa más que vitalidad. La vitalidad se encuentra en la proyección reflexiva del Espíritu de Vida como la subdivisión etérica del mundo físico. La palabra que viene a la mente al contemplar al Espíritu de Vida es “propósito”. Si la divinidad tiene algo en su creación, es un propósito. Una vida con propósito es una vida innegable. En su expresión, incluso la vitalidad de la vida en los éteres parece imposible de frustrar. En nuestras nacientes individualidades, caímos porque fuimos desviados del propósito cósmico de la creación. Pensamos egoístamente en nuestra mortalidad. Si un individuo encuentra un propósito en la vida, ese individuo se vuelve imparable. Imbuir el Ser con el propósito del Espíritu de Vida es un primer paso para completar la curación espiritual.

Cuando un individuo tiene un agudo sentido de la verdad, decimos que el individuo está iluminado. La mente se forma a partir de y por la luz de la verdad, y su propósito es dar forma a esa luz. La mente concreta está regida astrológicamente por Mercurio, que también rige al fósforo. La palabra fósforo significa “portador de luz”. Cuanto más claramente actúe el Espíritu en la mente concreta, tanto más podrá experimentar y expresar la luz de la verdad, y más verdadero será su pensamiento. El pensamiento ilustrado es un segundo paso hacia la salud espiritual completa. “Como es el pensamiento de un hombre en su corazón, así es él”.

Uno siempre vacila al hablar o escribir sobre el amor, debido a la conciencia de su inadecuación para ser un recipiente para él. Es doloroso reconocer esto de la adecuación. Es un dolor dulce por sus cualidades purificadoras y redentoras, pero no deja de ser doloroso. Se necesita coraje para amar. Por otro lado, el amor da coraje. Sin embargo, debemos amar, especialmente si queremos sanar y ser sanados. La curación restaura la totalidad. El Espíritu de Vida es completo en todos los sentidos de la palabra. Es hermoso cómo la totalidad del Espíritu de Vida se manifiesta en la creación. Su vida se manifiesta en la individualidad, con propósito; su luz se manifiesta en la mente concreta, en el pensamiento claro; y su amor se manifiesta en el mundo del deseo, donde más se necesita. El amor del Espíritu de Vida es la octava del amor en el mundo del deseo. El amor a través de la atracción impregna todo en el mundo del deseo, incluso las cosas desagradables. Una afluencia del amor del Espíritu de Vida en el mundo del deseo, rectifica todo en él. El amor del Espíritu de Vida de Cristo cambió significativa y permanentemente el cuerpo de deseos de la tierra, lo que hizo que la aspiración espiritual estuviera más disponible. Aceptar el amor del Espíritu de Vida en gracia, limpia nuestros apegos a nuestros deseos en lo que se llama el perdón de los pecados. “Vete y no peques más”. El poder sanador del Espíritu de Vida es obvio, incluso para los ojos pecadores.

Pocos han hecho el trabajo para desarrollar la capacidad de acceder directamente al Espíritu de Vida. Cristo-Jesús podía, a voluntad. La mayoría de los que alcanzan el Espíritu de Vida lo hacen en respuesta a una necesidad urgente, y lo hacen a través de llamamientos extremos. Incluso en las reuniones de oración de Sanación Rosacruz, donde hay un procedimiento diseñado para acceder al Espíritu de Vida, no sucede a menudo. Rara vez una sesión de oración termina con todos los participantes con lágrimas corriendo por sus mejillas. Nuestras oraciones son efectivas de todos modos, pero no son tan potentes como nuestros corazones quisieran que fueran. Atraemos la humedad, cuando queremos un chorro de agua. Afortunadamente, tomar en serio nuestras insuficiencias, frente al terrible sufrimiento, nos impulsa a esforzarnos con más ardor, para que finalmente tengamos éxito. Tenemos la promesa de que tendremos éxito: “De cierto, de cierto os digo: el que en mí cree, las obras que yo hago, él también las hará; y mayores...”

Pocos han hecho el trabajo para recibir directamente el Espíritu de Vida, ya sea como sanador o como paciente. La experiencia de ver a Cristo en Espíritu de Vida, incluso temporalmente, cegó físicamente a Saulo, y él era un alma fuerte. Incluso aquellos a su alrededor se quedaron sin palabras. La experiencia del Espíritu de Vida no debe entenderse a partir de esto como algo terrible, porque en realidad es maravilloso. También es algo sutil y poderoso. Muchos se perderían la experiencia, si se les presentara, debido a su sutileza y debido a su enfoque en las cosas mundanas. En otros, el efecto podría ser explosivo debido a la contaminación en sus almas. En la mayoría, sería maravilloso, pero también desperdiciado, debido a su incapacidad para usarlo. Es por esto que la obediencia es esencial en los pacientes que buscan recibir sanación espiritual. No vertemos oro fundido en el suelo, hacemos un molde para sostenerlo y mostrar su rara belleza. El Espíritu de Vida es más precioso que el oro. El Espíritu de la Vida es amor-sabiduría, y es completo, por lo que sabe dónde se necesita más.

La curación espiritual completa hasta la totalidad es nuestro objetivo final, pero es un objetivo lejano, tanto para los pacientes como para los que serían sanadores. Este objetivo no se alcanza de un salto. Esperar y holgazanear ciertamente no nos llevará a eso. Debemos hacer lo que podamos, cuando podamos. Hay mucho sufrimiento innecesario en el mundo que podemos mitigar de acuerdo con nuestras habilidades. Parte del sufrimiento es urgente. Como se dijo anteriormente, si alguien está sangrando profusamente, no predicamos sobre el Espíritu de Vida, aplicamos un torniquete donde más se necesita. Alguna forma de curación puede ser útil en cualquier paso del camino cosmológico desde el espíritu hasta el cuerpo físico denso.

El penetrante dolor extremo del alma, u otro sufrimiento, es difícil. Aliviar esta extremidad podría ser el torniquete más necesario. Las drogas pueden hacer eso, pero no tiene que ser una droga, y es mejor si no lo es. Las drogas que matan el dolor son a menudo ineficaces para este fin, porque nublan la conciencia. Hay otros medios.

El Espíritu de Vida no solo sigue el camino de la manifestación cosmológica. Puede ser transducido en su proyección reflexiva, los éteres. Esta es una de las metas del Servicio de Sanación Rosacruz. Este objetivo es producir una panacea etérica para ser aplicada con gran efectividad, donde más se necesita. Con él, las condiciones pueden cambiar con resultados notables con bastante rapidez. Este tipo de sanación tampoco ocurre todos los días. Las razones por las que no lo es son casi demasiado repetitivas para este ensayo: pocos están haciendo el trabajo (y es un trabajo duro) de producir la panacea, pocos son lo suficientemente puros y conmovedores para manejarlo; y hay pocos pacientes que estén lo suficientemente abiertos para creer en recibirlo, y de ellos, pocos son lo suficientemente persistentes y obedientes para ser recipientes de él.

No todo está perdido por falta de sanadores puros y conmovedores para manejar la panacea. Hay alternativas que pueden no ser tan completas en la curación, pero aún así son efectivas para aliviar el sufrimiento. Hay una alternativa que la mayoría de las personas pueden adaptarse para realizar. Es sanación etérica que también se llama sanación magnética. Hubo un tiempo en que se enseñaba en la sede de la Fraternidad Rosacruz. Un curandero magnético es alguien que tiene un cuerpo etérico, vital robusto, especialmente rico en éter de vida. Uno puede enriquecer el componente de éter de vida del cuerpo vital con una dieta rica en alimentos crudos y vitales. Se puede hacer más con jugos de vegetales crudos recién exprimidos, sacados inmediatamente del exprimidor antes de que se disipen los éteres. Max Heindel usó leche cruda para este propósito. La leche cruda es más rica en éter vital inmediatamente después de dejar al animal. Un sanador magnético debe ser sensible a los flujos etéricos en su cuerpo y ser capaz de controlarlos.

La curación magnética es un proceso de dos pasos. El primer paso es eliminar el éter perezoso, llamado miasma, que causa un bloqueo o dolor y sufrimiento. Es útil tener clarividencia etérica para localizar el miasma, pero no es obligatorio, si uno tiene suficiente sensibilidad. El sanador debe tener cuidado de no atraer el miasma demasiado profundamente a su propio cuerpo vital, para que no se adquiera la condición. Cuando se elimina el éter pesado, es importante que se desintegre en el fuego o se lave con agua para que no regrese al paciente ni a otra persona. El efecto es inmediato. Este escritor se ha estado retorciendo en el suelo de dolor por los calambres en un momento, y se ha liberado un momento después, cuando un curandero magnético competente le quitó el éter ofensivo. Desafortunadamente, este escritor tardó muchos años en aprender la causa interna de sus calambres. El segundo paso es opcional. Depende de las necesidades del paciente y de la fuerza del cuerpo vital del agente. Es una cuestión de juicio. Si el cuerpo vital del paciente es débil y el cuerpo vital del sanador es fuerte, el curandero puede dar al paciente una carga de éter de su cuerpo vital. El sanador debe ser tan cuidadoso con dar como con sacar. Si se da demasiado flujo etérico, el sanador puede quedar exhausto y vulnerable. Un paciente demasiado necesitado puede extraer inconscientemente demasiado flujo etérico para el bien del sanador. Los sanadores suelen ser almas compasivas que son vulnerables a que esto suceda. Esta es otra razón por la cual los curanderos deben ser sensibles, conscientes de sí mismos y controlados.

Muchos aspirantes dudan de su capacidad para realizar incluso una pequeña curación de cualquier tipo. Es cierto que algunas personas tienen más capacidad de curación que otras. Probablemente comenzaron en un renacimiento anterior. La mayoría de la gente debería ser capaz de hacer un poco de curación. Si no es de otra manera, pueden orar. Uno nunca conoce su habilidad, si no lo intenta. Algunos comienzan sacando un dolor de cabeza de un ser querido. Este escritor tiene una amiga que comenzó en su juventud a sentir y aliviar los dolores de las mascotas que amaba. Ahora casi siempre es un buen momento para comenzar algo nuevo en beneficio de los demás.

A veces, “donde más se necesita” la manera es por el cuerpo de deseos. Muchos necesitan alivio de la presión de los patrones de deseo poco saludables, a veces llamados complejos. El asesoramiento espiritual y la psicoterapia pueden ayudar. Este tipo de curación es especialmente difícil porque la naturaleza inferior, el ego falso, tiene su hogar en el cuerpo de deseos, desde donde controla la vida más de lo que es bueno para el individuo. A menudo, esta naturaleza inferior no quiere que el cuerpo de deseos sea purgado y transformado al servicio del Sí mismo, porque sería privado de su tiranía. Trabajando desde los mundos internos, los Auxiliares Invisibles tienen más éxito en hacer frente a la naturaleza inferior del paciente, debido a las armonías curativas que impregnan el mundo del deseo, y porque el cuerpo físico denso, que es el premio, no está en juego inmediatamente. Sin embargo, en algún momento el trabajo tiene que hallarse en el cuerpo en plena conciencia de vigilia para que sea completo. La astrología es extremadamente útil en este tipo de curación. Con la astrología, el nexo del deseo puede ubicarse con precisión, a pesar de las tortuosas tácticas de la naturaleza inferior. La astrología también puede indicar atributos de carácter positivos, como alternativas al comportamiento negativo. Una de las mejores cosas de la astrología es que indica los momentos en que la ayuda será más efectiva. El tiempo es de suma importancia en todas las formas de curación.

Con o sin astrología, este tipo de sanación del alma suele ser desagradable para el sanador. Cuando un individuo está en el punto en que la enfermedad se convierte en curación (son dos caras de la misma moneda), las cosas se están resolviendo, literalmente. Parte de lo que se está resolviendo puede haber comenzado como malos pensamientos hace varios renacimientos. A menudo ha habido una lucha interna. En el momento en que un comportamiento se ha convertido en algo que requiere curación, cuando está maduro, ha tenido tiempo de crecer, enconarse, mutar e incluso tomar forma en el aura, por lo general es desagradable. Es análogo a sudar cosas desagradables en una condición física febril, apesta. Cuando “donde más se necesita” es en el cuerpo de deseos, la personalidad es probablemente desagradable, por decir lo mínimo. Es fácil que el agente sea rechazado, atacado o arrastrado al conflicto como proyección de un enemigo interno. La curación del alma no es fácil ni agradable. Algunos practicantes encuentran útil orar larga y profundamente por los pacientes. Es difícil sentir aversión por alguien por quien has orado con todo tu corazón. Las ideas sobre qué hacer a menudo surgen cuando se conecta con alguien en oración.

Se ha mencionado la curación del alma, de pasada, simplemente para despertar el interés en la posibilidad. Es un tema demasiado amplio para un ensayo corto, que ya puede ser demasiado largo. Demasiado combustible puede sofocar un incendio. Afortunadamente, si el corazón de uno está en el lugar correcto, hay intuición. Todo el conocimiento sobre la curación es solo para servir a la intuición. La intuición no solo sabe lo que más se necesita, sino que sabe dónde se necesita más.



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Contemporary Mystic Christianity


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